viernes, 2 de diciembre de 2011

"Bienaventurados...


…los que creen en los pasos de peatones, porque pronto verán a Dios.”

Esta frase seguro que alguno ya me la habrá escuchado alguna vez, y es toda una realidad aquí en Tánger. En esta ciudad reina lo que podríamos denominar como la anarquía vial, siendo un auténtico peligro andar por sus calles por la gran cantidad de vehículos que circulan por las mismas. Hoy cruzo este puente para acercaros al tema de la seguridad vial aquí en Marruecos, y más concretamente en Tánger.

La “octava bienaventuranza” que da título a la entrada de hoy no es ni mucho menos una exageración, la verdad es que tampoco es exclusiva de este país, en alguna ocasión que he viajado a Portugal también he comprobado su verosimilitud allí o incluso en muchas de las calles de nuestras ciudades y pueblos españoles es una auténtica prueba de supervivencia cruzar una calle en según qué momentos, como digo la frase con la que titulo hoy es una muestra del problema que supone la convivencia de peatones y vehículos en las calles de esta ciudad y el peligro de desplazarse por carreteras dentro de la geografía marroquí.

Para empezar os comento que el parque automovilístico de la ciudad de Tánger tiene que estar entorno a los trescientos mil vehículos, si no más. Por las calles de Tánger uno se encuentra todo tipo de vehículos: autobuses urbanos, petit taxis, grand taxis, furgonetas de transporte de personas a sus lugares de trabajo, turismos, camiones grandes de transporte de mercancías, furgonetas de todo tipos y tamaños, motocicletas, motocarros… la verdad es que la variedad de vehículos es también un elemento curioso que uno puede observar sentado desde la terraza de algunos de los cafés que hay en el Boulevard Pasteur. La mayoría de los vehículos son bastante antiguos, con el problema de polución que ello conlleva. Una de las cosas que más puede sorprender al viajero cuando llega a la ciudad es la gran cantidad de vehículos de la marca Mercedes Benz que se ven por la calle, la mayoría vehículos muy antiguos desechados de la región centroeuropea.
Grands taxis de Tánger, todos Mercedes Benz.

Con tal cantidad de vehículos circulando casi las veinticuatro horas del día por la calle, y de la manera en que lo hacen, es sorprendente que no haya más accidentes de tráfico de los que hay, supongo que de alguna manera existe una cuadrilla de ángeles protectores o algo así que ponen cierta seguridad dentro de todo ese caos circulatorio. La manera de conducir de la gente aquí es un tanto “peculiar”, por definirlo suavemente, tienen una manera muy especial de entender el código de circulación, todas las normas y señalizaciones son relativas cuando uno se pone al volante.

Por poner un ejemplo, y relacionado con el título de la entrada, está por la primera vez que haya visto parar a algún vehículo ante un paso de peatones en el que hay gente cruzando o que vaya a cruzar, a no ser que el mismo esté regulado por un semáforo. Esto hace que la gente de a pie, los peatones, tampoco busquen los pasos de peatones para cruzar las calles y normalmente cruzan por donde mejor les parece, con el peligro que ello conlleva. Muchas veces da la impresión de estar ante una batalla de nervios y templanza entre los conductores y los peatones, raro es que no haya más accidentes de los que hay, repito.

Aquí para cruzar la calle “basta” con establecer contacto visual con el conductor del vehículo que viene y levantar suavemente la mano más próxima al coche que se aproxima, qué sencillo verdad? Haciendo este simple gesto podemos cruzar por donde nos dé la real gana, y si vamos conduciendo no nos sorprenda que alguien nos lo haga con la mayor tranquilidad del mundo, y sin temer en ningún momento por su integridad física.
Circulación normal de vehículos por la Plaza de Francia.

Poniéndonos ahora al volante de un vehículo os comento que para conducir por Marruecos uno tiene que tener el cuello con la flexibilidad de Regan, la niña de “El exorcista”, pues nunca sabes por dónde te va a salir el peligro. Aquí las señalizaciones de tráfico son relativas, el número de carriles es algo variable, la preferencia en la circulación es una variable relacionada con la cara que le eches y la velocidad que te des para ser el primero y colarte, las señales de control de velocidad son unos elementos decorativos del mobiliario urbano o interurbano como lo pueden ser los árboles o los mojones kilométricos (por favor buscadlo y sabréis a lo que me refiero, no me seáis soeces) Así pues para un conductor marroquí la continuidad de una línea o no en una carretera interurbana está más relacionada con la belleza del piso que con la limitación de adelantamiento o las señales de STOP son un elemento orientativo, con un valor de ley inferior a esa ley no escrita de “Wahed u wahed” (uno y uno) que consiste en que en una calle donde hay un STOP en caso de atasco el que circula por la vía preferente debe dejar pasar al que viene de la vía en la que se encuentra la señal de STOP (KIF,en árabe). Capítulo aparte merece el tema de la preferencia en las rotondas, todo un misterio sin resolver que estoy convencido que el mismísimo Iker Jiménez podría dedicar un par de especiales o tres y no encontraría respuesta alguna al problema.
Estos no respetaron la "ley no escrita"
 Como veis el tema de la seguridad vial aquí da para bastante, ciertamente es un ejercicio de supervivencia extrema circular o caminar por las calles de Tánger, se unen dos “especies urbanas” bastante numerosas ambas, vehículos y peatones, ya me gustaría a mí ver aquí al protagonista del programa “El último superviviente” conduciendo para entrar y salir luego indemne de la Rompuán(rotonda) de la carretera de Tetouán.
Rompuán de Tetouán, un día tranquilo.
 Para los que, en homenaje al nombre de este blog, hacéis puentazo estos días y vais a viajar por carretera, tened mucha precaución al volante, recordad siempre que lo importante es llegar bien al lugar de descanso, no copiéis las maneras de conducción de los habitantes del otro lado del Estrecho.

Un abrazo muy fuerte para todos, ¡¡SED FELICES!! y …


2 comentarios:

  1. Yo en homenaje a este blog me cojeré un al qantarazooo! Gracias por contarnos la situación! me he reído bastante jajaj! un abrazo!

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  2. Je m'appelle Coralie6 de diciembre de 2011, 15:12

    Aquí va mi contribución al tema de las rotondas (basada en casi dos años de conducción temeraria por las calles de Tánger).

    Hay varios tipos de rotondas, lo primero es darte cuenta en que tipo estas a punto de adentrarte con tu vehículo:

    - rotondas en los grandes ejes (por ejemplo Tánger-Tétouan) que sirven para ralentizar ligeramente la velocidad a la que se circula (ya de por si un 20-30% superior a la indicada en los paneles) . La prioridad la tiene el que entra en la rotonda, es decir, el que va echando leches de Tanger a Tetouan a 100 km/hora. El que está dentro de la rotonda o se ha equivocado, o está dando media vuelta, así que le toca ceder el paso.

    - rotondas catastróficas (la de la mezquita siriana o Castilla, por ejemplo) de unos 5-6 carriles, de los que se utiliza 1 , como mucho 2. Ahí la prioridad no la tiene nadie, para entrar en ellas hay que ir metiendo morro poquito a poquito (utilizando al coche que hace lo mismo en el carril de tu derecha como para-choches a poder ser) hasta que..TACHAN! bloqueas a los que están girando en la rotonda. A estos no les queda más opción que dejarte pasar. Para salir de la rotonda, adoptas el otro rol, así que de nada sirve adaptar tu trayectoria a la curva de la rotonda: te quedarás atascado y molestarás a todo el mundo. Coges el carril de la izquierda, y cuando ves que estás perpendicular a la salida que quieres tomar, volantazo y para fuera.

    - rotondas con semáforo (Iberia) las más surrealistas en mi opinión... Haces caso al semáforo, pero siempre te encuentras atascado. El policía apostado en ellas complica todavía más la circulación. No hay consejos para estas, solo utilizar el claxon para advertir a los demás de tus desplazamientos laterales.

    - rotondas de verdad (California). Por alguna extraña razón, de vez en cuando te encuentras con una rotonda que funciona como rotonda realmente! Y los mismos coches que hacen mil barbaridades en las demás, la respetan!! Estas me extrañan más que todas las otras juntas... me inspiran desconfianza. Por supuesto, hay muy muy pocas.

    P.D. Cabe mencionar también el fabuloso semáforo a 4 tiempos conocido como Beni Makada Stop. Primero pasan los que vienen del norte, luego los del este,siguen los del sur y por último les toca a los del oeste. Aunque ahora que lo pienso...está en obras! Estarán convirtiéndolo en una rotonda???

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