viernes, 9 de diciembre de 2011

Derby


Si alguno pensaba que no iba a hablar del partido de mañana en el blog siento desilusionarle pues la entrada de hoy va sobre eso, claro que sobre mi particular visión al respecto y mi  versión de cómo ese acontecimiento vaya a afectar al entorno en el que estoy viviendo ahora.

De antemano aviso a todos los que esperen que hable de fútbol se van a llevar un chasco pues no tengo pensado dedicarle más que unas pocas palabras a ese tema porque lo que más me preocupa, lo que más me hace pensar en el partido de mañana es la facilidad con la que mañana a la gente se le olvidarán sus problemas, se le acabarán las penas, cómo por unos instantes retrocederemos dos milenios y volveremos estar como en la antigua Roma con su famoso lema “PAN Y CIRCO”, como bien nombró mi amigo José Manuel hace unos meses “PANIS ET FUTBOLENSIS”.

Leía con bastante escepticismo y asombro la portada de un diario deportivo esta mañana en el que titulaban a toda página “EL MUNDO SE PARA MAÑANA”, y la verdad es que me he quedado perplejo ante tal afirmación pues el acontecimiento futbolístico sobrepasará las fronteras de España y será seguido con especial atención en todo el mundo, y me he preguntado cómo afectará a la gente de aquí de Tánger, y ya tengo la respuesta, efectivamente como predice el periódico aquí mañana la mayoría de la gente se plantará mañana delante de sus televisores, llenarán los cafés y se pondrán las camisetas de ambos contendientes para seguir con la mayor atención posible lo que en el partido suceda, y esto me ha llevado a plantearme una serie de dudas y cuestiones al respecto de lo que esto implica que me gustaría compartir con todos vosotros.

En primer lugar el ejemplo que darán los jugadores, entrenadores, árbitros y público asistente al campo a todos esos telespectadores que a través de las distintas televisiones del mundo seguirán el partido, espero que sea mejor que los espectáculos que han tenido lugar en los últimos choques entre ambos equipos, donde al final lo que se supone que debe ser una gran fiesta deportiva ha terminado siendo algo más próximo a una batalla bélica que a una contienda deportiva. Todos, culés y madridistas, contribuyen al calentamiento global de estos encuentros y flaco favor hacen a la imagen del deporte español fuera de sus fronteras.

Por otro lado me da miedo que el mundo se paralice por un motivo tan…peregrino, con la que está cayendo en todo el mundo me parece una atrocidad que adoremos como a dioses a gente que no tiene más mérito que saber darle patadas a un balón, y me explico, son gente que debe ser admirada por las cualidades que tienen pero de ahí a endiosarlos creo que va un trecho. Ninguno de los jugadores que mañana se pondrán sobre el terreno de juego me parecen que sean dignos de mover a su alrededor toda la cantidad de gente y dinero que mueven. En esto quizá tampoco nos damos cuenta del ejemplo que proyectan sobre los niños de hoy en día, concretamente aquí en Tánger todos los chavales sueñan con jugar al fútbol, que los cojan para algún equipo bueno y poder ganar una cantidad de dinero brutal que de otra manera jamás podrían conseguir. No es por ser partidista pero frases como “Me envidian porque soy rico y guapo” no ayudan a quitarle a los chavales de la cabeza esas ideas disparatadas y hacerles que se centren en lo realmente importante, sus estudios y en ser buenas personas.
La peña barcelonista de Tánger está a la vuelta de casa.

En este punto me gustaría hacer un inciso, que desde mi punto de vista refleja bastante bien la idiosincrasia de nuestra sociedad, por el dinero que a día de hoy gana uno los grandes cracks de ambos equipos, el que vosotros queráis, trabajan veinticinco personas con una formación mucho mejor que la de estos futbolistas y haciendo un trabajo muchísimo más importante, por poneros un ejemplo, ahora que está tan de moda criticar a los maestros porque se quejan mucho por su salario y tal, un maestro cuyo trabajo, probablemente, sea uno de los más importantes que hay en nuestra sociedad cobra en un año lo mismo que algunos jugadores cobran en una semana, y sinceramente quizá estos jugadores deberían darle ese salario a algunos maestros para que les ayudaran a organizarse sus cabecitas, porque no seamos hipócritas hay jugadores cuya capacidad de jugar al fútbol y ganar dinero es inversamente proporcional a su capacidad cognoscitiva, saben donde tienen la derecha y la izquierda porque las usan en su trabajo pero como les preguntes la tabla del nueve lo mismo mi primo Enrique les tiene que hacer un “regate matemático”.

Otro aspecto que me gustaría comentar, este es más cercano al terreno donde yo me estoy moviendo aquí, es el tema de la cantidad de dinero que se mueven en estos partidos, y en general en el mundo del fútbol, creo que no somos conscientes de las barbaridades que se hacen y se pagan en el mundo del fútbol, y en vez de rebelarnos contra esa injusticia les seguimos, me incluyo en esto, como ovejas, como un rebaño detrás de su amo. Os doy un dato que a mí me deja helado y que me hace plantearme si debo o no contribuir a este circo, con el salario de Messi o Cristiano Ronaldo de un año, de 365 días, se podría mantener el proyecto del Hogar Lerchundi que beneficia a cerca de setenta familias durante… cien años, 36.500 días. A veces no nos damos cuenta de que las soluciones a muchos de los problemas que existen consisten en el uso de el sentido común, y desde luego mi sentido común, el menos común de todos los sentidos, me hace pensar que es una verdadera injusticia que tanta gente lo esté pasando mal mientras que unos cuantos vividores, cuyo único mérito es darle patadas a una pelota de cuero que lo mismo la ha cosido un niño de ocho años en un taller de un país de Asia, cobran verdaderos pastizales, creo que la crisis no le ha llegado a los dos clubs que mañana afrontan ese enésimo “partido del siglo”, no he oído que tengan pensado hacer EREs ni que tengan pensado reducciones de plantilla, más bien en algún caso al contrario, ni que sus trabajadores estén en huelga por no cobrar ni nada de eso, bueno sí que he oído algo, que deben a las arcas públicas “algún dinerillo”, pero bueno ese es el precio que hay que pagar por el “PAN Y CIRCO”.


En definitiva a mí me generan muchas dudas todos estos interrogantes en torno al partido de fútbol que mañana disputarán Real Madrid y  F.C. Barcelona, sobre todo de la importancia que para la gente tendrá ese momento, como por unos momentos dejará de existir el problema del paro, las famosas primas de riesgo, la subida de las letras de las hipotecas y todas esas cosas que día a día perturban la tranquilidad de la gente.

En cuanto a lo futbolístico, unas letras muy rápidas, espero que se vea un gran partido con dos equipos luchando por ganar, desplegando para ello su mejor fútbol, aunque creo que alguno de los dos equipos sale a empatar pero bueno eso es mentalidad de equipo pequeño y a mí no me cuadra. Si gana el Barça… mi vida no cambiará lo más mínimo y si pierde tampoco, ¿y la vuestra?
Esperemos que al final sólo se hable de los goles.

Un fuerte abrazo a todos y ¡¡SED MUY FELICES!!  sin depender del resultado.

PD: Hoy hemos recibido una sorpresa muy grande en nuestra casa, dos de las antiguas componentes de la comunidad del Hogar Lerchundi, María y Lia, han venido a pasar unos días con nosotros y a apoyar a la colonia barcelonista del Hogar.

3 comentarios:

  1. je m'appelle Coralie10 de diciembre de 2011, 11:06

    Muy buena reflexión, y brillante la comparación del sueldo de un futbolista con el dinero que gestiona el hogar Lerchundi. Y estoy de acuerdo contigo en parte, a este engranaje de derroche le damos cuerda nosotros pero con una ayudita de los medios de comunicación. Si no se difundiesen los partidos 5 días a la semana, con sus correspondientes entrevistas, comentarios, artículos en los periódicos etc el impacto de la manipulación del "pan y circo" no saldría tan cara.

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  2. Yo, la verdad, es que este año sí lo veré, para socializarme un poco...
    Todos contribuímos sin darnos cuenta, es cierto, pero quienes fomentan que esto siga, quienes fomentan el fenómeno mediático son los gobiernos que levantan la mano ante las deudas de los clubes porque saben que es un circo seguro para muchos y que si hablamos del clásico durante una semana ignoraremos un poco más todo lo que ocurre a nuestro alrededor.
    La venda del fútbol!
    Buena entrada Mario! Un abrazo

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  3. Estoy totalmente de acuerdo con vosotros, la importancia que nosotros le damos a estos partidos está sobredimensionada. Creo que el bombardeo masivo desde los medios de comunicación con noticias de estos partidos, y del deporte en general, actúa a modo de cortina de humo para olvidar situaciones que realmente son más importantes y en las que se actúa de una manera "singular", ahora mismo me viene a la cabeza el tema de Marta Domínguez el año pasado coincidiendo con la huelga de los controladores aéreos y su pésima gestión de la misma por parte del gobierno.
    Es una realidad que el fútbol está por encima del bien y del mal y que mientras a una persona anónima por deber a hacienda una cantidad le embargan las cuentas a los clubes de fútbol no sólo no se les embargan las cuentas si no que se les permite que a los ojos de todo el mundo paguen cantidades de dinero astronómicas a los futbolistas cuando tienen deudas pendientes con el erario público, al final nos guste el fútbol o no, nos guste un equipo u otro, en cierta manera todos somos acreedores de los fichajes de los equipos de fútbol.

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